Amado Pueblo Mío:
ME MUESTRO A MI PUEBLO A CADA INSTANTE, Y NO ME RECONOCE.
ME DOY A LOS MÍOS Y NO ME ACEPTAN.
Grande es Mi Misericordia que se da sin esperar la respuesta de Mi Pueblo que se muestra ajeno a Mi Divino Amor.
Amados hijos, son el Tesoro de Mi entrega. Mi Corazón Sacrosanto se encuentra colmado de bendiciones y las derramo sobre todos los Míos. Unos las acogen, otros las desprecian, pero Me doy en igual medida para toda la humanidad como el sol da su luz a todos por igual.
Mis hijos son Amor, cada uno sabe que vive por Voluntad Divina, cada uno tiene Nuestro Amor en igual proporción, tanto que en algún instante de la vida, refleja ese contenido precioso de Nuestro Amor.
Mi Amor presente en los Míos, les motiva a una constante búsqueda de Mi Verdad, no para satisfacción personal, sino porque EN CUANTO MÁS ME CONOCEN, MAYOR ES NUESTRA UNIÓN, LA QUE SE SUBLIMA EN UNIÓN A MI PADECER Y A MI GOZO.
Hijos, lo humano llega a quedar opacado por el ansia del alma que Me busca, al desear gustar más de lo Divino que de lo humano, no porque lo humano sea indebido, sino porque el ego humano mal formado, tiende en mayor medida, a actuar en el libre albedrío y tiende a alejarse de Mí.
Deseo que Mi Pueblo anhele la búsqueda de conocimiento, de inquietud por encontrar Mi Amor a plenitud y gustar de la obediencia a Mis pedidos. Mi Pueblo es el que ama el permanecer junto a Mí, pero más gusta el entregarse a Mí con el alma, potencias y sentidos, y Yo, como un Mendigo de Amor, Me enamoro del alma que Me busca, que Me llama, que Me adora y Me reconoce.
PUEBLO MÍO, LES INVITO NUEVAMENTE A ALIMENTARSE DEL AMOR HACIA MÍ, RENOVANDO LA CONSAGRACIÓN A MI CORAZÓN. Les llamo a ser testigos de Mi Amor para que en la fraternidad, dentro de la que son llamados a vivir, cada criatura humana encuentre en esa fraternidad el deleite, dando sin esperar recibir.
Alerto a cada uno de ustedes, ante la inminente llegada del impostor, para que el ansia por Mi Casa les lleve a mantenerse conscientes y alertas y no sean engañados.
El impostor llega a usurpar lo que es Mío, y SON USTEDES LOS LLAMADOS A SER RESPONSABLES DEL OBRAR Y ACTUAR PERSONAL SIN QUE LA CONFUSIÓN LES DETENGA, NI LES DOBLEGUE LA ANGUSTIA. ESTO SE LLAMA FE.
LES ALERTO, CONVIÉRTANSE, PARA NO PERDER LA VIDA ETERNA, NO SE DESATINEN POR SALVAR LO MATERIAL. LO MATERIAL ES AGUA EN MEDIO DE LOS DEDOS DE LA MANO.
Amados Míos, gran parte de la humanidad se ha sumergido en una continua ofensa a Mi Sagrado Corazón, llevándolo a sangrar. La ira del hombre crece aceleradamente. Los actos inhumanos se dan por deleite, y es que al alejarse de Mí, Mis hijos sienten ser dueños del mundo, olvidándome por completo. Esto ha permitido que el mal les lleve a cometer abominaciones en contra de la misma vida.
Mi Pueblo Me mantiene a la espera del querer humano que se niega a vivir como Yo les mando. Todos miran los acontecimientos, pero solo unos cuantos reaccionan.
Me duelo ante la pasividad de Mi Iglesia.
Hijos, son errantes en la propia Tierra, buscan refugio en lugares ajenos, en donde luego unos serán enviados al campo de batalla y otros traicionarán a quien les acogió.
El hombre dejó de ser hombre al deshumanizarse, regocijándose en el dolor del hermano. Así en medio de la maldad en que se ha sumergido la humanidad, no desamparo a MI PUEBLO, la vendimia está próxima y separaré el trigo de la cizaña.
¿CUÁNTO AMOR TIENES EN TU CORAZÓN?
¿SERÁ EL MISMO QUE RECIBES DE MÍ?
Amados Míos, manténganse en estado de alerta, la tercera guerra mundial no se encuentra en el olvido. Me duele el pronunciar esta Verdad, Mi Amor les alerta para que no caigan en la garras del engañador. Son Mi Pueblo, y cada uno debe orar con el corazón, con toda la mente, potencias y sentidos, tomando con seriedad el que puedan participar de Mis Bienes, los que no legaré a quienes no se hayan comprometido con Mi Casa.
La tierra se estremece ante tanta maldad en este instante.
Oren por Inglaterra, padecerá por la mano traicionera del hombre.
Oren, hijos, donde había sol habrá frío, y donde hay frío, será el sol el que predomine.
Oren, hijos Míos, oren. Ya el hombre decide sobre su muerte, ¿qué más creará para ofenderme?
Oren por Méjico, padecerá, la violencia recrudecerá y la Naturaleza reaccionará.
Oren, hijos Míos, la tierra se mueve con gran fuerza.
La Purificación llega a toda la humanidad, sin ser esperada. El espanto cubrirá la tierra, el día se oscurecerá ante tanta lágrima derramada, Mi Madre enjugará el rostro de Mi Pueblo doliente.
Un gran descubrimiento avivará a esta civilización, pero pasado el anuncio, acogerán el mal, mediante la ciencia mal empleada y tomarán el rumbo del dolor, del padecer, y de la maldad.
Amado Pueblo Mío, el poder económico auspicia al mal, y el mal derribará la economía para causar la desesperación de los hombres. (La finalidad: instaurar una moneda única).
Hijos, no fijen sus esperanzas en el dios metal, éste cae y no se levantará.
LA ANGUSTIA DE QUIENES NO ESPERAN EN MÍ, SERÁ SIN FIN.
Pueblo Mío, Puerto Rico padecerá, al ser tierra de Mi Madre, es tierra de bendición y Mi Madre le rescatará de entre las aguas.
Pueblo Mío, llegarán a anhelar la paz que han despreciado, la humanidad vivirá en la angustia ante las constantes amenazas de unos hacia otros, hasta que éstas se concreten en una verdad desesperante. El corazón del hombre Me expulsa y el mal toma Mi lugar con permisión humana.
¡Atentos!, la hambruna se acerca causando la desesperación, en medio de la peste que avanza sin que les den a conocer la verdad.
Hijos, conózcanme para que sean fortalecidos por Mi Espíritu, y se unan formando una sola muralla de protección ante la ira desenfrenada, la hambruna sin precedentes, la enfermedad sin cura que la ciencia no explica al no encontrar respuesta. Por ello, atesoren los medicamentos que Mi Madre les da a conocer.
AMADO PUEBLO MÍO, EL DÍA SE VUELVE NOCHE, NO SE SEPAREN DE MÍ.
EL MIRARSE INTERIORMENTE ES BENDICIÓN.
EL AVISO SE ACERCA Y SERÁN EXAMINADOS, NO MENOSPRECIEN MIS LLAMADOS, ARREPIÉNTANSE.
Son burla de sus hermanos, pero no olviden que los que desprecian Mis Advertencias, perecen en el mismo mal que reiteradamente enmudece al hombre, pero nunca antes como en este instante.
Mi Palabra dice:
“Porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá.” (Mt 24,21)
NO DESPRECIEN MIS LLAMADOS, PERMANEZCAN ATENTOS.
AL FINAL MI PUEBLO SERÁ LIBRE DE TODA MALDAD Y YO SERÉ SU DIOS.
NO TEMAN, YO PERMANEZCO CON MI PUEBLO.
Su Jesús.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA.
COMENTARIO DEL INSTRUMENTO
Hermanos (as):
En este instante de paciente espera, Cristo nos da nuevamente a conocer eventos que vivimos ya, señal de que la humanidad se acerca al indudable padecer por sus indebidos actos que han llegado a ser más que salvajes.
Cuando el hombre no mira a Dios, el mal le toma y los actos del hombre son irreconocibles, pues son más del mal que del bien. EN ESTA BATALLA ENTRE EL BIEN Y EL MAL POR LAS ALMAS, LASTIMOSAMENTE GRAN PARTE DE LA HUMANIDAD ACOGE FALSAS IDEOLOGÍAS Y DOCTRINAS CON EL FIN DE EXPERIMENTAR NOVEDADES A LAS QUE NO LLEGARÁ SIN QUE DIOS ESTÉ PRESENTE EN LA VIDA.
Somos llamados a permanecer atentos, ¿a qué?
A las estrategias que el mal utiliza para desviar a los hijos de Dios y llevarlos a actuar unos contra otros.
A la usurpación que varias tendencias de moda, como la “new age”, cometen al apoderarse de las criaturas humanas, envolviéndolas con las palabras propias del cristianismo.
La escalada de violencia corre como el aire y el mal supera a la criatura humana llevándola a gozarse en el dolor ajeno.
Una generación que no reconoce las señales en que vive, es dominada por el mal.
Por eso, Cristo nos llama casi que con exigencia a crecer, a conocerle más, a gustar más de Sus Asuntos y a no olvidar que la Fe y el conocimiento refuerzan la respuesta correcta para no caer en el mal.
La ciencia mal empleada ha dejado secuelas que el hombre no percibe pero que padecerá en carne propia, como nos lo ha dado a conocer el Cielo.
El mal no descansa, y el hombre duerme, ahora:
¡DESPIERTA PUEBLO DE DIOS!, MANTÉN TU FE VIVA Y PALPITANTE Y SÉ FIRME.
Amén.
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